martes, 11 de diciembre de 2012

El poder de nuestras palabras y nuestros pensamientos


"Nuestro lenguaje forma nuestras vidas y hechiza nuestro pensamiento". Albert Einstein

Acostumbramos a hablar y dejar salir por nuestra boca palabras de todo tipo, nos parece tan normal decirlas que olvidamos la importancia de las mismas y el “peso” que estas pueden tener en los que las reciben y aunque no lo creas en el que las piensa y pronuncia.

Aquello de que “hablamos sin pensar” no es tan cierto, pues toda palabra es generada por un pensamiento y un sentimiento. Por eso es importante que midamos cada vez más como están nuestros sentimientos, y como están nuestro corazón y alma, pues si no controlamos ese pensamiento generador primario que es el que nos hace hablar podríamos decir palabras que tienen tanto o más peso negativo que una bala directa al corazón.

Es por eso que te invito en este tiempo de adviento, de Navidad, de fiestas y celebraciones, como lo veas en tu propia existencia para que pienses más y hables mejor.

Cada palabra tiene un peso positivo o negativo, así que si dices algo de cariño la persona lo recibirá así y su efecto en su persona e incluso en su día o vida podría ser determinante para estar bien o para estar mal.

No tienes idea del increíble efecto que producen las cosas que decimos. La mayoría de las veces no nos damos cuenta de lo que decimos y mucho menos de las consecuencias. Ya es hora que eso cambie en ti.

“Las palabras son un reflejo de nuestros pensamientos y sentimientos”. Para eso es correcto que lo primero que nos ocurra siempre sea tener un pensamiento positivo que puede ser bueno y no uno negativo que tenga el efecto malo para el que lo recibe. Un pensamiento negativo lleva a palabras negativas y si no detenemos ese pensamiento, se puede transformar en palabras y posteriormente en acciones que realmente concluyan con algo que quizá no queramos. Es ahí donde se hace importante revisar nuestros pensamientos, revisar nuestro corazón, porque allí comienza todo.

¿Te has puesto a pensar el daño tan grande que puedes hacer cuando tratas a una persona mal? ¿O cuando entre amigos se tratan con palabras como “estúpido” “imbecil” y otras más que dichas comúnmente puede ser realmente un reforzamiento negativo para la otra persona que la recibe directa a su corazón? En todas esas ocasiones lastimamos, ofendemos y no aportamos nada positivo a la otra persona. Viene ahí entonces la pregunta ¿a quien le estamos diciendo estas cosas negativas? ¿es a personas que no queremos cerca o que no apreciamos? Muchas veces es la gente más importante en nuestra vida y los más cercanos.

Por eso tenemos que pensar antes de hablar hay que recordar aquella frase que dice: "Dios nos dio dos oídos y una sola boca, usémosla en esa misma proporción", es decir que debemos escuchar más y hablar menos, máxime si lo que diremos no tiene un “peso positivo”.

Intentemos construir cuando hablamos y no por el contrario destruir, podrías pensar “ah, es que yo le digo tonto(a) pero es de cariño”, ¿les digo algo? No creo que exista ningún idioma, dialecto o traducción en la que “tonto” tenga un significado agradable, así que como crees que esa palabra le llega a la persona: construirá o destruirá sentimientos, pues de tanto decirla la persona se la cree, se llega a creer que es tonto, estúpida, entro otros horribles adjetivos.

Porque no haces una prueba diciendo: “lindo”, “agradable”, “inteligente”, “te quiero”, “te amo”, “eres especial” y verás los resultados tan hermosos que hacemos salir en las personas, verás sus rostros brillar, verás su corazón saltar de alegría, veras su vida y su aura pasar a un nuevo estado, uno en el que es más fácil alcanzar la felicidad conjuntamente con los que nos rodean.

Esta vida es como un dominó ordenado en forma circular, si empujas una ficha para que caiga sobre la siguiente y comiencen a caer todas consecutivamente, tarde o temprano te llegará el empujón que iniciaste a ti mismo por la espalda.

Aunque no lo creas, las palabras encierran un poder que no conocemos profundamente, y que deberíamos empezar a conocer ¡ya! Vienen desde pensamientos que son los que construyen nuestra existencia, nuestro mundo, nuestro universo, tu futuro. Las palabras trabajan directamente sobre nuestro cerebro constantemente enviándole información, esta información genera en nosotros sentimientos, pensamientos, formas de actuar. Así que si hablamos palabras positivas la probabilidad de que sucedan cosas buenas es enorme, si hablamos cosas negativas ¿que crees que pasará?

Así que les dejo la inquietud, analicen sus sentimientos, eliminen sus enojos impulsivos, eliminen sus gritos y palabras feas, su “hablar golpeado”, no existe palabra grosera buena por más cariño con la que se diga, para eso existe en nuestro diccionario infinidad de adjetivos hermosos para decirle a quien está cerca de ti, así que ¡úsalos!

El amor se debe expresar, pues para eso existe, no esperes más el cambio inicia en ti.

Luis Barboza.

Cambiaste mi sentir, cambiaste mi vida


Hoy no es un día cualquiera, es un día muy especial. Hace quince años llegó a mi vida una personita que cambió mi vida, despertó mis sentimientos más profundos y hermosos, e impregnó desde entonces y por primera vez en mí vida una palabra con un valor único e invaluable: esa palabra se llama “papá”. Desde ese día por la noche cuando luego de una batalla que llevó todo el día su mamá con gran fortaleza y que concluyó con dificultad, se transformó con su respiro y su primer llanto, y tras mi voz diciendo tu nombre y cuando te amo apaciguó su estado y llamé su atención. Gracias a Dios demostraste desde el inicio lo fuerte y luchadora que ibas a ser.

Esa personita, mi hija María Laura me convirtió en algo más que un simple ser humano, me dio fuerzas para impulsarme, para crecer, para desarrollarme, me dio fortaleza para sentirme con razones de sobra para cada día ver la vida diferente y con cada sonrisa, con cada abrazo, con cada momento único que me ha regalado durante toda su vida, me convirtió en un hombre realmente feliz, lleno de esperanza, de júbilo, de alegrías, así desde tan pequeñita bebé que era, fue creciendo y regalándome cada día una esperanza de vida con cada destello hermoso de sus ojos y el brillo precioso de la sonrisa que refleja su alma. 

Hoy ya estas grande y recuerdo cada pequeño detalle de esta vida que he podido ver crecer en ti, con tus ideales tan lindos, tus cariños tan especiales, tu bondad y tantas características hermosas de las que te hacen ser maravillosa y excelente persona. Sigue así, sigue luchando por lo que piensas, sigue luchando por dejar tu huella en esta vida que Dios te ha dado, esfuérzate para alcanzar tus metas y llegar a logros que cada vez te darán mayor satisfacción y recompensas, Dios premia a los que se esfuerzan y a las personas nobles de corazón como tu y les da muchos dones para vivir mejor.

Esfuérzate por ser feliz cada día, no dejes que las dificultades se conviertan en tristezas, velas como eso, no son más que simples obstáculos en el camino para superar y pasar a un lugar mejor cada vez, aprende de todos, incluso de las personas que parecen no saber nada, todos tienen una historia que contar, respeta a todos por igual, respétales las vidas y sus pensamientos, más no los compartas si no hacen que tu corazón se sienta bien, eso si, aléjate de los groseros y escandalosos que solo quieren llamar la atención, pues la mayoría de veces no ayudan en el crecimiento espiritual. No te rebajes a discutir al nivel de las personas que solo dicen y piensan tonterías, pues siempre te llevarán ventaja y te superarán por su experiencia.

De todo lo que veas y experimentes aprende siempre algo, no dejes que el día termine sin aprender algo nuevo; lee, observa, investiga, saca provecho de lo que te rodea y crece de adentro hacia afuera, desde adentro en tu alma y tu corazón hacia afuera mi vida, donde siempre veamos brillar la belleza de tu alma en tu rostro y cuerpo, deja que tu espíritu crezca y sea cada día mejor, pues eso te acercará cada vez más a Dios.

Gracias mi vida preciosa, mi princesa hermosa, tú me convertiste en algo maravilloso, y te estaré eternamente agradecido por llegar a mi vida, por tu cariño, por tu apoyo, por tu amor, tú me convertiste en algo maravilloso: ¡me hiciste papá! Nunca jamás bajo ninguna circunstancia te sientas sola, siempre habrá alguien dispuesto a acompañarte en tu camino, tienes quienes te ama, tienen tu ángel de la guarda y siempre mientras Dios me dé vida estaré contigo, incluso aunque muera estaré en alma, espíritu y amor.

María Laura: mi Nanis preciosa, mi pequeñita Mananis, ¡como has crecido! Tan solo ayer eras una bebé a la que chineaba en mis brazos. Muchas Felicidades en tu cumpleaños #15, este es un día muy especial para ti y también para mi y todos los que te amamos, te amo muchísimo, gracias por existir y a Dios por la oportunidad de estar a tu lado, te ama, tu papito,

Luis.
01.11.2012

viernes, 19 de octubre de 2012

Carta 19 de octubre


Estaba Dios sentado en su trono en el cielo, miró hacia un lado y me dijo “Luis, ya es hora de que vayas a experimentar ese mundo, que aprendas y que cumplas tu misión, luego, cuando lo hayas logrado, regresa acá y cuéntame todo detalladamente, eso si, anda y ama, y regresa con las manos tan llenas de estos dones que te he dado, tan usados como te sea posible.”, entonces cuando Dios me brindó esa oportunidad de hacerlo: yo estaba listo para nacer.

Me estaba enviando a conocer y vivir esta vida con grandes metas por cumplir y con grandes pruebas para superar, llena de increíbles aventuras que muchos tan solo sueñan y que Él ya había preparado camino para que yo pudiera tenerlas al alcance. EL sabía que no iba a ser sencillo, ni fácil, pero que tenía que ser así para cumplir un propósito que EL tenía para mi.

Entonces me aliste, preparé todo, y justo antes de que yo iba a dar el salto para venir, Dios me detuvo… se quedó pensativo un momento y me dijo “Luis, hay algo importante que debes saber…”, ¿Qué Señor, dime?, “El asunto aquí es, querido Luis, que no va a ser nada fácil, es más… va a ser muy difícil, tendrás que ir cuesta arriba con muchas cosas casi todo el tiempo, pasarás momentos de sufrimiento y dolor, tendrás limitaciones y debilidades. También habrán cosas muy bonitas, pero tendrás que luchar para conseguirlas, pues el mundo es muy complejo, difícil y cruel; así como te he creado, así como  vas tu para allá, te será más difícil aún, te rechazarán, te harán a un lado, te humillarán y se burlarán de ti, y todo esto pasará desde muy temprano en la mañana hasta ya quizás medio día”.

Dios me miró un poco preocupado, con sus ojos tiernos y su rostro brillante como siempre, lleno de amor. Yo lo miré y me entró un miedo enorme, me puse a sudar y muy nervioso le dije: Señor: ¿Será que puedes darme una manita para poder salir adelante con esto? EL sonrió enormemente y me dijo: “¡Pues claro que si querido hijo mio! Te prometo que nunca estarás solo, YO personalmente te acompañaré toda tu vida tomado de tu mano, caminaré a tu lado y te alzaré para cruzar, pondré gente buena cerca, te enviaré dos ángeles para que tu los cuides y uno celestial para que te cuide a ti” Yo le dije: ¡Gracias Señor por ser tan bueno conmigo! Eso definitivamente me dio confianza.

Pero Dios no conformándose con solo enviarme a nacer así como soy y con todo lo que me había dicho y prometido, me dijo algo más, me dijo: “Luis, además de eso te daré un regalo muy especial: te enviaré una persona maravillosa que te cuidará todo el tiempo, te protegerá y rezará por ti siempre, te levantará cuando caigas, cuando se burlen de ti te abrazará, cuando te minimicen te dirá tus fortalezas y virtudes, cuando llores te consolará, y cuando llegues a medio día te dirá “así como eres, así te amo, sigue adelante” y te apoyará siempre.

Yo le dije: Señor: ¿Cómo alguien que no me conoce puede ser tan buena persona conmigo? ¿Cómo alguien que no sabe como yo soy y voy a ser puede aceptarme tal como me has hecho?, ¿Cómo alguien puede amarme teniendo yo tantas complicaciones?. Una vez más, Dios sonrió y me miró directamente a los ojos y me dijo: “Querido Luis, hijo mio, ¡eso es lo maravilloso de esta persona tan especial que te voy a dar!,  tu le honrarás y respetarás”.

Yo le pregunté, Señor: y ¿cómo se llama esa persona?, Él me dijo: ”Se llama Lidiette, la gente le dice Yeti, pero tu Luis, tu le dirás: mamá”.  Entonces sonreí y muy confiado ¡salté!: fue ahí cuando nací.


Hoy mi mamá está de cumpleaños y aunque ya pasó el medio día, ella sigue acá acompañándome en mi camino, recordándome que siempre se puede seguir adelante, que tengo su apoyo y el de muchos más y que poco a poco las cosas van mejorando.

Gracias mamá por haberle dicho a DIOS que SI me aceptabas como tu hijo, así tal y como soy, con mis virtudes y defectos, con mis fortalezas y debilidades, ¡con todas y cada una de mis cosas!

Yo te estaré eternamente agradecido. ¡Feliz Cumpleaños! ¡Te amo, mamá!
Tu hijo, Luis.

martes, 21 de agosto de 2012

Inventario para comenzar a ser feliz


Hoy recibí un mensaje que decía “Tratar de cambiar a alguien es una pérdida de tiempo. La sola idea de cambiar a alguien es estar diciendo que no es lo suficientemente buenos como son, y se empapa con el juicio y la desaprobación. Eso no es un pensamiento de agradecimiento o de amor, y esos pensamientos sólo traerán separación entre usted y esa persona.” ¿Es cierto no? si estamos con alguien es porque: queremos estar, porque nos complementa, porque nos hace existir felices, porque lo deseamos, sino es así, entonces lo mejor analizar que es lo que se quiere y que rumbo se debe tomar, al final no es asunto de “cambiar a una persona”, es que esa persona este feliz en su vida, y si esa felicidad es junto a ti y para ti eso es maravilloso bien, pero sino no le dejarás ser feliz y ni tampoco tu lo serás.

Y esto me lleva a analizar otra frase que nos bombardea todo el tiempo y dice que: “la vida es corta”, nos lo dicen todo el tiempo, reforzando solamente el concepto para que así sea, la vida es corta nos dicen todo el tiempo, para que también la aprovechemos. Es tan corta, tanto que solo ayer estábamos jugando bolinchas en la escuela, y hoy… ya pasaron 20, 30, 40 o más años desde entonces y estamos “clavados” en nuestra ajetreada vida sin saber a donde vamos.

He leído tantas frases sobre como debería ser la vida, que pareciera que ya muchos sabían como debía ser, como debíamos llevarla y disfrutarla. Así que me pregunto: ¿porque si es tan claro no nos enseñan de pequeños que así debe ser? O es que solamente algunos privilegiados lo merecen o solo nos dicen o nos damos cuenta cuando nuestro entendimiento llegó a una madurez tan alta como nuestros años y ya tenemos tantas “deficiencias” desarrolladas como para comenzar a disfrutar?

Creo que no, creo que siempre podemos tener el tiempo para recapacitar y generar nuevos pensamientos. Los pensamientos son los generadores del tiempo y tipo de vida, por ejemplo, tu pasado fue construido con los pensamientos que antes de eso tuvieras, tan solo mira atrás y recuerda como pensabas, por eso es bueno reforzar en los niños y las niñas desde pequeños los buenos pensamientos, reforzar sus virtudes y fortalezas y no sus debilidades. Tus últimos pensamientos o los de hace poco tiempo atrás construyeron los momentos que estas viviendo ahora;  los pensamientos actuales y los “sueños despiertos” son los que logran concretar tu vida que está por venir, sea para tu bien o para tu desdicha, pero la responsabilidad total es tuya, no es culpa ni de Dios, ni del amigo que no te ayudó, ni de tu papá o mamá que no estuvo, ni de la sociedad, etc, no, solamente es generado por las oportunidades que te permites aceptar llevar a cabo, muchas tiene un precio alto o perder “algo” para “ganar” otro algo, pero valen la pena cuando ves que luego todo se acomoda nuevamente y que lo que creíste perder no se perdió, solo cambió, aunque tarde un poco.

Otra pregunta fundamental es: ¿que se necesita para ser feliz? Porque buscamos tanto y luego de obtener un montón de cosas vividas, de alcanzar metas, de lograr cosas materiales, cosas también no materiales pero tangibles, recibiendo amor, recibiendo paz, recibiendo estabilidad, y aun así tu completitud sigue pendiente de satisfacerse; no apreciando lo que se logra, se sigue buscando… buscando algo que no sabes que es… ¿no será más bien porque realmente ya lo tienes todo?, pero aun así siempre queremos más… será que no aprendemos a valorar la cosas, la vida, o que no vemos con claridad los logros que tenemos y los que nos faltan por lograr de manera objetiva?

Hace unos días escribí que: la felicidad no es eterna, es la eternidad la que está hecha de momentos de felicidad, pero solo hasta que comprendemos eso, podemos empezar a ser felices, solo hasta que haces una lista de las cosas que tienes y has logrado te darás cuenta de lo que no has hecho y de lo que te hace falta hacer o tener y que probablemente sea poco lo que falta para tener lo que deseas.

La cuestión acá es darse cuenta pronto de eso, para que cuando lo entiendas puedas analizar tres asuntos:

  1. Primero: que no hayas perdido mucho tiempo buscando lo que ya tenías,
  2. Segundo: que no sea tarde y pierdas lo valioso que ya tienes,
  3. Y tercero: que más bien logres cuidar lo que tienes, respetarlo, valorarlo, agradecerlo, abrazarlo en su libertad y disfrutarlo, porque quizás lo que te hace falta ya lo tienes, pero no lo logras ver con claridad entre el montón de maravillosas bendiciones que la vida y Dios nos dan, y si no es así, si no lo tienes pues para que no pierdas más tiempo y realmente trabajes en buscar con determinación tu objetivo.

Ya es tiempo de comenzar a vivir, sino, como dijo Charles Chaplin: “la vida es una obra de teatro que no permite ensayos, por eso: canta, baila, ríe, llora y vive intensamente cada momento de tu vida antes que el telón baje y la obra termine  sin aplausos”, y que conste que “vivir la vida intensamente” no significa hacer loco, gastar todos los cartuchos, despilfarrar, desbocarse, es más bien vivirla intensamente con lo que vas obteniendo y con lo que amas y te aman y quieren estar cerca de ti para vivir esta hermosa y única vida.

Luis Barboza

miércoles, 30 de mayo de 2012

Sin morir hoy, viviré mañana


Año 1988, quien iba a pensar que ha pasado tanto tiempo desde entonces; aún me encontraba apunto de terminar el colegio llevando el quinto año, descubriendo a penas que el colegio además de aprender también servía para divertirse y que ya estaba por concluir.
Intentando entender tantas cosas que no sabía donde me llevarían, en apogeo de adolescente con todo lo que eso implica, creciendo…

Allá entonces pensé durante unos años que probablemente no vería llegar mis 40, no se porque escogí ese número de edad exactamente, pero si las razones que me agobiaban, sabía que sería difícil llegar, enfrentaba todo al mismo tiempo y con poca guía, sufriendo en lo desconocido y lo que no tenía explicación, todo esto en el silencio de mi corazón. Supongo que todos de una u otra forma pasamos por eso. Sin embargo, Dios puso gente importante de apoyo a mi alcance, una de esas personas muy especial, alguien que llegó y me ayudó un poco a organizar ideas y saber que a pesar de las dificultades se podía ir paso a paso, aún sin conocer las razones de fondo, hoy esa persona no me dirige palabra, incluso hace unos meses atrás pensé que no era para tanto que eso me hiciera sentir así, pero la verdad cuando llegas a considerar alguien como un segundo padre, siendo sincero, aun me duele de verdad, pero Dios sabrá las razones que le impulsan a no considerar la persona integral.

A pesar de todo, pasaron los años y recibí muchas bendiciones: entre esas poder conocer más a fondo una persona muy especial, llena de virtudes, muy espiritual y con un enorme corazón, ella se convertiría en la madre de mis hijos, y a pesar de que hoy por diferencias que la vida nos enfrenta, vamos por caminos distintos, le sigo agradeciendo profundamente y con gran aprecio que me diera a las personas mas increíbles y maravillosas de este mundo, mis dos hijos: María Laura y Kevin, en quienes deposité mi amor completo, pues desde que me enteré de que María Laura vendría al mundo solté a llorar de alegría y aunque difícil su nacimiento nunca olvidaré llegar a la incubadora y hablarle suavemente, y ver como reconoció mi voz y dejó de llorar por un buen rato, fue increíble! Luego llegó Kevin a quien tuve el privilegio de ser el primero en alzar recién salidito al mundo y así como llegó le di beso en la frente y bendición para la vida. Verlos crecer ha sido la aventura más hermosa que alguien pueda vivir y estoy muy agradecido con Dios por darme esa maravillosa oportunidad.

Enfrente esos años atrás con gran intensión de hacer las cosas lo mejor posible, como siempre habrá gente que te apoya y gente que no, si todo fuera fácil que aburrido sería no? Me dediqué a la familia, al trabajo y al estudio, intercalando todo esto para lograr llegar a tener una profesión, o bueno, un título que me acreditara como tal: esa misma persona que mencionaba al principio me dijo una vez: “Luis, el profesional no es el que tiene un título, es el que hace las cosas bien, con dedicación y de manera profesional”, ¡sabías palabras!

Creo que he logrado alcanzar muchas metas que me he propuesto poco a poco, esforzándome por dar lo mejor de mí en cada proceso. 

Hoy 30 de mayo de 2012 estoy llegando a mis 40 años de vida, dicen que son los mejores años para el hombre, hacía adelante vienen los años para irlo descubriendo, pues todos estos años atrás han sido muy buenos años con todo y todo como dicen, así que solo buenas perspectivas me puedo imaginar. Pues he logrado creo, hacer más cosas de las que había pensado lograría vivir hace “veintitantos” años atrás.

Atravesé dificultades en la escuela, en el colegio, en la adolescencia, en la entrada a la etapa de adulto, y aún en los últimos años me ha tocado una etapa en la que he enfrentado muchos cambios a la vez que inesperados, y sin embargo, Dios me tendió la mano o creo que todo el brazo completo, para sostenerme y seguir adelante viviendo esta maravillosa vida que el me dio para eso, para vivirla.

Quizá haya por ahí muchos que aún hoy me señalen, que me critiquen, pero ¿eso que importa ahora? Igual si consideras que haces bien las cosas la gente te critica, te señalan y te quieren destruir y si por el contrario cambias te siguen criticando y señalando igual, así que el enigma está resuelto el problema nunca he sido yo, el problema siempre han sido las personas que por apatía, envidia o ignorancia entre otras razones no aceptan lo que uno es como persona y por tanto ellos fallan al valorarte, así que cero estrés con esa gente y ellos son los que tienen realmente un problema que resolver.

Hoy, vivo caminando por este nuevo camino, esta ruta que en algún momento llamé mi “Ruta Desconocida” y que ahora apenas comienzo a comprender poco a poco, con cada gota de sudor que lanzo para superar las dificultades y alcanzar las metas, con cada lágrima que derramo en mi mejilla ya sea por alegría o por tristeza, por cada sentimiento que me embarga y acoge, por cada espacio en que puedo mirar con la frente en alto.

Miro atrás y sé que ha sido duro, que pensé firmemente que no lograría ver este día y ya ves, tú tenías dispuesto cada día de mi pasado, y tienes dispuesto cada día de mi futuro en el cual confío plenamente estar a tu lado mi Dios, en cuyo presente hoy estoy agradecido.

Sin morir hoy, viviré mañana… y aun si muriera hoy diría: gracias Dios mio por que no se como agradecerte que me hayas dado tanto, tanta vida, tanto amor, tanto que compartir, tantas personas lindas a mi alrededor, tantas personas para amar.

Gracias Señor Dios Padre Celestial por que me has puesto en un lugar privilegiado, en el lugar que debo estar; gracias por dejar que mis hijos sigan a mi lado tan cerquita de mi, compartiendo nuestras vidas, tristezas y alegrías, todas y cada una de las etapas que nos fortalecen para crecer como seres humanos. Gracias Dios por darme a quien amar, sentir y compartir el resto de mi vida, por tanta bondad que me rodea, por tanto y tanto amor que has puesto a mi alrededor, y sobre todo y por encima de todo por que siento tu amor en mi alma, siento como cobijas mi corazón cuando me siento triste, siento tu sonrisa cuando yo estoy alegre y mi espíritu se regocija en ti, gracias por un día tener ese pensamiento de crearme y ponerme en esta Tierra, estoy luchando por demostrar lo mejor de mi para ti,  gracias por amarme tal y como me hiciste aquella vez que lo pensaste, por amarme como solo TU Señor me lo has demostrado todo este tiempo.

Ahora celebraré mis 40 años de forma tranquila rodeado de quienes amo, agradeciendo a todas las personas que han demostrado su cariño, a mis padres, mis hijos, mis hermanos, cuñadas, primos, primas, tías y mis amigos, en especial también a mi nueva familia que me ha sostenido y amado tanto, la que me viene apoyando desde todo este tiempo atrás de dificultades y unas cuantas alegrías, alegrías que estoy seguro van a ir aumentando, gracias a quien amo tanto y que me hace suspirar, sentir, vibrar, vivir.
Ahora en alcanzado esta meta que veía tan difícil, y como muchas otras en las que he dudado antes por falta de fe en mi mismo y en lo que Dios me ha fortalecido, que con la experiencia que he ganado estos últimos años y sabiendo que viviré un día más, uno a la vez. Teniendo en mis oídos las especiales palabras:  “La vida comienza a los cuarenta”; con esto entonces iniciaré esta nueva oportunidad de seguir rehaciendo y construyendo mi vida.

Viviré cada vez que tú me permitas respirar con el alma en el cuerpo y hasta donde lo dispongas cuando un día despiertes y digas: “Luis, ven junto a mí”, hasta ese día viviré agradecido contigo, pues luego te lo agradeceré en persona Padre Celestial.

Luis Barboza.

jueves, 17 de mayo de 2012

Las diferencias, ¡ respétalas !

A la vez que todos somos individuos y por tanto como dice la misma palabra somos diferentes, también somos iguales a la vista de Dios. 

Por la tanto no hay nada mejor que todos seamos diferentes para que en la diversidad haya mejores cosas para el mundo y evolución.

Lo importante es el respeto por los demás y con la forma de ser de cada individuo. Por eso, antes de señalar recuerda que un dedo apunta al frente y cuatro te apuntan a ti. O como leí en una frase "Habla de la vida de los demás, cuando tu sea un ejemplo".

Acá no se trata de si eres mejor que los demás, es respetar a los demás siempre en toda circunstancia y si ya llegaste al punto máximo de tu evolución y eres todo un ejemplo: entonces ayuda a los demás a mejorar para que este mundo sea mejor cada día.

Ante todo... Las diferencias, ¡respétalas!

domingo, 8 de abril de 2012

El mensaje de Judas

Nota: si usted participó anoche en la quema de Judas tal vez no le agrade este texto.
¡Resucitó! ¡Jesús resucitó!  ¡y Judas…..?

Hoy celebramos la maravillosa buena noticia, el milagro de milagros, la resurrección de nuestro Señor Jesucristo. Para cristianos y no tan cristianos, practicantes o no, hasta no creyentes, todos estamos enterados de esta bendición que nos abrió la puerta a la vida eterna, aunque no lo acepten, así es. Pero la pregunta es: ¿te has puesto a pensar en el mensaje que nos dejó Judas?

Anoche entre escándalos y procesiones paganas bastante molestas para mi gusto, “quemaron a Judas”, como siempre no me meto en el asunto, pues aunque respeto la decisión de cada quien de participar o hacer en su vida lo que deseen, no comparto esta “celebración” que opaca lo que realmente de fondo es importante.

Lo quemaron para conmemorar su “traición”, conglomerado de señaladores y juzgadores de los que pueden lanzar la primera piedra siempre sin problema alguno.

Pero, Judas tomó un camino diferente. Fue tentado por la codicia de unas monedas de oro, para decir donde estaba su maestro y así que él fuera a la sinagoga a dar la versión de su defensa, más lo entregaba para su muerte, pero así estaba escrito que debía ser, el ya había sido escogido para esto, pero cuando entró en pánico por darse cuenta de lo que había pasado se deprimió al máximo, se sintió solo, abandonado, agobiado, acorralado, sin salida, sin solución… ¿acaso no te suena conocido?

Así es, salvo que seas de otro planeta, creo todos hemos pasado por una situación de tensión en la que creemos que no tenemos salida, que tenemos el mayor problema de todo el planeta, que nadie ha pasado por algo similar, es más: nadie ha sufrido algo similar, tanto que no tenemos forma de resolverlo; lastimosamente muchos como Judas pasamos por esto, y muchos no soportan la insoportable situación sin salida y deciden abandonar el mundo para solucionarlo.

Yo creo que Judas fue víctima de la situación y quizá por falta de apoyo no pudo encontrar la solución correcta, terminó con su vida en una soga y seguramente fue encontrado por Jesucristo en su descenso, así que muy probablemente nuestro Señor lo perdonó ahí mismo y ascendió junto a Jesús y muchas almas más que fueron elevadas al cielo ese mismo día, no lo sé, ese es mi pensamiento, no juzgo a Judas ni a nadie, eso solo Dios lo puede hacer.

Pero acá creo que debemos reflexionar el mensaje que Judas nos deja: cuantas veces las personas viven situaciones que consideran las más terribles y toman esa misma decisión que él tomó? Cuantas veces? Cuantas almas?

Lo que quiero dejar acá es un mensaje para que tú que me lees pienses la próxima vez que tengas un problema tan grande que no tiene salida ni solución, tan enorme! y que puedas tomar un minuto para pensar si es como el de Judas? Y entonces recuerdes mis palabras: si Judas tan solo hubieras soportado tres días, esperado tres días, tan solo tres días!, entonces habría visto la luz brillar como nunca antes se ha visto en este mundo.

Así que piensa, la próxima vez que no tengas salida, tan solo hay que esperar tres días para que la oscuridad pase, tan solo hay que esperar un poco para que llegue la luz a nosotros, pues la luz no nos abandonada jamás, porque la luz dijo “estaré con ustedes hasta el fin de los tiempos”, créeme, te lo dice alguien que también ha tenido que esperar tres días y hasta más para salir de problemas sin solución.


Luis Barboza

jueves, 15 de marzo de 2012

"El amor es como una vela al viento"




Definitivamente cuando se tiene se debe cuidar. Por eso es importante: la constancia, el romance, los detalles, el poner atención, el "estar ahí" presente. 


Se deben respirar proyectos conjuntos, metas similares, se deben saborean las risas por las mismas cosas con solo volverse a ver, el apoyo y el soporte de un abrazo y un hombro donde recostar la mejilla cuando se requiera. 


Aquí no cabe la tibieza, el hoy si y mañana no sé, el dudar que se quiere, el poner la atención hacia otro lado. Acá no cabe desgastar energías hacía otros rumbos sobre ríos que te empapan "un minuto de grandeza", más luego, secos como el árido desierto, donde la desolación llega derribando todo. ¡No se vale aflojar! pues puede ser mortal, "el que pestañea, pierde".


El compromiso es eso, es una palabra muy fuerte y si eres capaz de decirla, debes tener las fuerzas para sostenerla. De ahí lo importante de valorar lo que se tiene y lo que se quiere, y tenerlo muy claro. Aquello de dar sin esperar nada a cambio, es válido si, pero no es perdurable, no es funcional, el ser humano no funciona así, la convivencia no funciona así, eso cansa, destruye, desedifica.


No se puede pensar "no porque puede causarme dolor" entonces ya están decidiendo como será, así no funciona, Se debe saber hacia donde se va y como te ves a futuro. A veces hay que cambiar o hacer ajustes en las riendas para lograr el objetivo, ¿pero te digo algo? ¡vale la pena!


Pero sea cual sea tu idea, es "como una vela al viento", sino la cuidas.... ¡se apaga!  


Y no, no es un sacrificio, si estas dispuest@ a esto entonces conocerás lo más hermoso que Dios ha creado, si eso es lo que escoges libremente entonces podrás disfrutar: el AMOR.

Luis Barboza
Marzo 15, 2012