El beneficio que tenemos muchos seres humanos de poder comunicarnos hablando es un don único, no tan exclusivo, pero no por menos indispensable; esto, a pesar de que millones de personas en el mundo no tienen ese don directo y otros que lo tienen y no lo saben utilizar.
Si no fuera porque podemos hablar, la comunicación sería bastante difícil, pues nuestra mente se cierra a que los medios de comunicación son pocos, aunque muchos sabemos que hay más métodos pero no nos atrevemos a evolucionar… aún…
Pero lo importante que quiero hoy rescatar es ¿Qué tan a menudo hablamos por hablar? ¿Qué tan frecuentemente hablamos sin sentido y producto de eso no medimos si nuestro estado de ánimo nos permite ser optimistas y objetivos a la misma vez?.
Debemos marcar en nuestra mente y delimitar cuando podemos hablar y cuando debemos analizar antes de hablar, para poder pensar con detenimiento lo que queremos decir y hacer, pues el don es extraordinario pero a la vez peligroso…
De ahí que me he puesto a pensar bastante que me falta tanto por aprender, tanto que controlar sobre mi mismo, sobre lo que pienso, como actúo y principalmente lo que hablo, esto incluye pensar más lo que digo, valorar a quien se lo digo y por supuesto no ser impulsivo al conversar.
He aquí algunos ejemplos que se me ocurren:
Cuando hablar sobra: es cuando estamos enojados, es mejor callar; cuando no sabemos el tema, es mejor callar, cuando es un chisme, cuando alguien nos habla mal de otros, cuando no sabemos “dónde suenan las campanas”, cuando amamos realmente a alguien y no estamos de buen humor, ánimo o no sabemos que responder, en todos estos casos y muchos mas es mejor callar, pues hablar sobra y puede lastimar.
Cuando hablar falta y es necesario: cuando ves alguien con ansiedad y necesita un consejo; cuando ves un amigo en apuros y necesita una palabra de aliento, de esperanza; cuando alguien llora y necesita consuelo, palabras como: aquí estoy, cuenta conmigo, todo saldrá bien, o simplemente superar la barrera de la comunicación verbal y hacer algo que para muchos es imposible siquiera pensar que tenga tanto poder en un ser humano: simplemente dar un abrazo, es una palabra universal que dice todo mi apoyo está contigo!!
Un abrazo para mis amigos.
Luis
